El peronismo se planta a la UCR y advierte que apoyará a las universidades si respetan los cambios a la ley ómnibus del Senado

Los radicales quedaron incómodos por el pacto del gobierno con la UBA. Los 99 legisladores de UP son fundamentales para sesionar.

El peronismo se planta a la UCR y advierte que apoyará a las universidades si respetan los cambios a la ley ómnibus del Senado

La UCR y el kirchnerismo van por la revancha para ponerse de acuerdo sobre temas legislativos, después que fracasara este miércoles el entendimiento para impulsar un dictamen de todo el arco opositor para aumentar los haberes jubilatorios. 

Este viernes el bloque liderado por Rodrigo de Loredo pidió la convocatoria a sesión especial para el próximo 21 de mayo, para tratar proyectos que garanticen "la actualización de las partidas presupuestarias de todas las universidades del país".

La jugada busca desactivar la furiosa crítica de sindicatos docentes, el movimiento estudiantil y las comunidades académicas de casi todas las facultades que apuntaron contra el acuerdo que cerró el sector radical de Emiliano Yacobitti con el gobierno, para conseguir un incremento de 270 por ciento en las partidas para gastos operativos de la UBA y un 300 por ciento en el presupuesto de hospitales universitarios. Las críticas obedecen a que ese acuerdo no incluyó a todas las universidades del país.

En ese contexto, el peronismo endureció su posición frente a la bancada del cordobés De Loredo, que además es apuntado por haber conseguido para su sector la habilitación del gobierno de la Universidad de Río Tercero. 

Lousteau le propuso al peronismo blindar artículos con dos tercios para que Diputados no pueda revertir los cambios

"Estamos cansados que los radicales negocien con la nuestra. Convocan a sesión haciéndose los guapos y los 100 diputados los tenemos que poner nosotros, para que después ellos negocien la Universidad de Río Tercero o cargos en el gobierno", afirmó a LPO uno de los líderes del bloque de diputados peronistas.

En efecto, con 99 diputados Unión por la Patria es la llave para el quórum y la mayoría, pero no quiere que los radicales utilicen el recinto como plataforma para ensayar discursos aguerridos y, luego, se subordinen a los designios del oficialismo para revertir las modificaciones a la ley ómnibus que el peronismo empuja en el Senado.

Estamos cansado que los radicales negocien con la nuestra. Convocan a sesión haciéndose los guapos y los 100 diputados los tenemos que poner nosotros, para que después ellos negocien la Universidad de Río Tercero o cargos en el gobierno.

Como reveló LPO, Karina Milei entabló conversaciones con Cristian Ritondo y Miguel Pichetto para que la Cámara Baja insista con la versión de la ley que obtuvo media sanción y descarte las modificaciones que se hagan en el Senado, donde el peronismo tendría más chances de incidir. Por eso, el kirchnerismo persigue un entendimiento que alcance el blindaje de los cambios que introduzca la cámara revisora.

El jefe del bloque radical, Rodrigo de Loredo.

Un legislador que participó del zoom que hicieron los radicales este viernes admitió que uno de los presentes preguntó si estaban habilitados a hablar con el peronismo o había algún encargado de iniciar el acercamiento. De Loredo habría dado luz verde para que esas conversaciones, que nunca se interrumpen, se profundicen.

Otra fuente de la UCR relativizó que un eventual acuerdo con el peronismo pase por pautar posiciones sobre la ley ómnibus. "Hay tanta complejidad con los distintos temas, y más con la Ley Bases, que las conversaciones sobre universidades y jubilaciones buscan ser limitadas a esos puntos exclusivamente", afirmó.

Desde el entorno de Germán Martínez no respondieron a las consultas de LPO pero hasta el miércoles habían deliberado intensamente con los radicales por la suba de los haberes previsionales, tal como anticipó LPO. Sin embargo, esas negociaciones irritaron al sector más refractario a votar con el kirchnerismo y el ingenio político de quienes trabajaban en el acuerdo no alcanzó.

Los peronistas están enojados porque creen que lo de la UBA fue un arreglo nuestro, pero el pedido de sesión especial demuestra que desde el bloque queremos una solución para todas las universidades.

De hecho, fue Martín Tetaz quien puso el grito en el cielo a través de Twitter, a pesar de que tanto Martínez como Itai Hagman en el plenario de comisiones reconocieron y lamentaron públicamente que habían estado muy cerca de un acuerdo.

Con esa experiencia tan cerca, los radicales pusieron en marcha un movimiento a dos bandas. Por un lado, reprochan a los libertarios la promoción de una grieta entre las universidades nacionales y, por otro, tratan de salir de la incomodidad de haber salvado la UBA y la Universidad de Río Tercero, facturadas como una compensación política a Emiliano Yacobitti y De Loredo, respectivamente.

En ese sentido, un radical sostuvo ante LPO que el acuerdo con el peronismo supone "la ampliación del presupuesto para todas las universidades, que también beneficia a los rectores peronistas". 

"Los peronistas están enojados porque creen que lo de la UBA fue un arreglo nuestro, pero el pedido de sesión especial demuestra que desde el bloque queremos una solución para todas las universidades", agregó un diputado radical.