El video de Eliana Guercio y Marcelo Polino, otra vez juntos, a 17 años del famoso cachetazo: “¡Somos tan...!”

Hace 17 años, una re caliente Eliana Guercio le cruzaba la cara a Marcelo Polino de un cachetazo e Intrusos, un gesto que se volvió un momento icónico de la televisión y que quedó en el recuerdo. Y ahora, los dos volvieron a verse en el estreno del nuevo Polémica en el Bar. Con Marcela […]

El video de Eliana Guercio y Marcelo Polino, otra vez juntos, a 17 años del famoso cachetazo: “¡Somos tan...!”

Hace 17 años, una re caliente Eliana Guercio le cruzaba la cara a Marcelo Polino de un cachetazo e Intrusos, un gesto que se volvió un momento icónico de la televisión y que quedó en el recuerdo. Y ahora, los dos volvieron a verse en el estreno del nuevo Polémica en el Bar.

Con Marcela Tinayre como conductora y el bar modernizado y una "mesaza" renovada, el programa reunió al fin a los viejos rivales, que se reencontraron luego de protagonizar ese tremendo episodio de violencia física, de esos que ya no se ven en la tele.

"Las cosas no se resuelven con violencia física, Eliana", le dijo Jorge Rial en ese momento a la vedette luego de la furiosa reacción que en el debut del histórico programa creado por Gerardo Sofovich fue recordado por Marcelo Polino y la Guercio.

"La última vez que la vi fue hace 17 años", susurró Poli a Marcela Tinayre, al entrar al bar y ver a la esposa de Chiquito romero sentada en la mesa. "Tenés algo marcado todavía desde hace más de una década”, acotó la hija de Mirtha Legrand.

EL REENCUENTRO DE ELIANA GUERCIO Y MARCELO POLINO

"No sé si me atrevo a acercarme", siguió el acting el jurado del Bailando, antes de acercarse a Eliana y saludarla con un falso beso. "¡Somos tan hipócritas en este ambiente!", repitieron sus líneas los nuevos compañeros, como si nada hubiera pasado en ese estudio de América TV.

Vale recordar ese bello momento televisivo, cuando Guercio fue invitada a Intrusos, en 2006. “Antes de contestarte, Jorge, quiero hacer una cosa", dijo ella, y se levantó, caminó hasta donde estaba Polino y le aplicó el famoso puñetazo al grito de “¡A mí nadie me va a tratar de puta!”.