En el peronismo apuntan a Juanjo Álvarez por la caída en Córdoba

Massa no pudo llegar a los 30 puntos, como esperaban en su equipo. El consejo que le dio Llaryora y no cumplió su armador. La tensión con Schiaretti fue clave.

En el peronismo apuntan a Juanjo Álvarez por la caída en Córdoba

En el peronismo empiezan a repartir culpas por la impactante derrota de Sergio Massa en la segunda vuelta contra Javier Milei y uno de los primeros apuntados es el histórico operador Juan José "Juanjo" Álvarez, encargado del armado de Córdoba.

Como reveló LPO, después de la primera vuelta Massa mandó a Juanjo Álvarez a instalarse en Córdoba y tratar de reducir una ventaja que se preveía sería muy grande.

En Córdoba, Massa había sacado 7 puntos en las PASO y creció hasta 13,5 en la general. En su equipo creían que necesitaba llegar a 30 puntos para tratar de que la provincia no fuera la clave del resultado nacional, como le pasó a Scioli en 2015.

Pero finalmente este domingo el candidato peronista llegó hasta 25,9, logrando otra vez duplicar sus votos pero muy lejos de las expectativas. De todos modos, la derrota fue contundente en todo el país: Milei ganó en 21 provincias.

El plan de Massa en Córdoba para no repetir el error de Scioli que le costó la presidencia

La estrategia de Juanjo Álvarez fue conseguir apoyos del peronismo territorial pasando por encima de Schiaretti, una jugada que ofendió al actual gobernador.

Después de las generales Massa se reunió con Llaryora y el mandatario electo le dijo entre otras cosas que no vaya a hacer campaña a Córdoba, que trate de pasar desapercibido.

Otros dirigentes cordobeses le remarcaron a Massa que no era buena idea apostar a los apoyos por goteo de dirigentes territoriales del peronismo y tampoco le convenía pasear a Natalia de la Sota como su figura en Córdoba porque no tiene peso electoral en la provincia.

Massa hizo todo lo contrario a esos consejos y en el peronismo cordobés se lo atribuyen a Juanjo Álvarez.

Pero lo más importante que le pidieron a Massa es que no chocara con Schiaretti. Pero a "El Gringo" no le cayó bien que le jueguen por abajo y salió a cuestionar fuerte a Massa por la inflación el juicio a la Corte. Esto forzó a Llaryora a seguir a Schiaretti y cruzar al tigrense.

En Córdoba tenían claro que era muy claro que era muy malo que Schiaretti salga a jugar contra Massa, y que eso haría insuficiente el apoyo del aparato territorial de Llaryora que efectivamente jugó para el ministro de Economía.

  El tigrense no le hizo caso