Qué es el “ayuno católico” que hace Marcela Tauro y cómo se hace

En pos de mantener la imagen, por la particularidad de aparecer en pantalla todos los días de su vida, Marcela Tauro acude a ciertas prácticas para sentirse bien. Claro que nunca se intuyó que una de esas actividades implicaría comer pan y agua durante cuarenta días. En una extensa entrevista, la panelista de Intrusos describió […]

Qué es el “ayuno católico” que hace Marcela Tauro y cómo se hace

En pos de mantener la imagen, por la particularidad de aparecer en pantalla todos los días de su vida, Marcela Tauro acude a ciertas prácticas para sentirse bien. Claro que nunca se intuyó que una de esas actividades implicaría comer pan y agua durante cuarenta días.

En una extensa entrevista, la panelista de Intrusos describió el origen de esta mecánica, que dista de una cuestión meramente estética y se vincula mucho más con lo espiritual, con una búsqueda de desintoxicación del alma, como hizo con su sanación en el Planetario.

Ante la pregunta de sus acciones por la apariencia, Marcela contó: “Me cuido porque soy coqueta, lo fui siempre. La televisión es tirana. Básicamente, ahora no me preocupa tanto. Hago détox o ayunos, pero no lo hago por un tema de estética”.

Así llegó la explicación de Tauro respecto a las particularidades de esa maniobra y especificó el origen: “Un día encuentro una señora que está en España pero que es argentina y me pareció muy graciosa: baila, es higienista y hace détox. Y ahí dije: “Voy a hacer el détox””. 

POR QUE MARCELA TAURO HACE AYUNO

Sobre las secuelas que percibió en su organismo, la periodista reconoció: “No llegué a los siete días pero me sentía con tanta energía que me encantó. Tenía rebien la piel, entonces lo tomé como costumbre".

"Y lo del ayuno tiene que ver más con otra cosa. No es el ayuno intermitente, es el ayuno católico. A mí me hizo muy bien el año pasado, sobre todo cuando volví a Intrusos”, firmó.

La cronista le consultó: “¿Qué es un ayuno católico?”. Ante lo cual Marcela explicó en Teleshow: “Es comer pan y agua solamente. Porque Jesús ayunó 40 días. Y lo hago para poder conectarme y despertar mi espiritualidad. Porque viste, uno vive terrenalmente”

Claro que la pandemia interrumpió el proceso: “Necesitaba algo para estar en paz, estar tranquila, saber qué quería, cuál era mi misión, qué es lo que quiero hacer de ahora en más. Lo pude hacer 15 días porque después justo me agarró COVID y no lo volví a hacer”.