Damián Betular respondió el mito más grande de los restaurantes: “¿Qué pasa si te devuelven el plato a la cocina?”

Mientras disfruta de un nuevo éxito de Masterchef, Damián Betular brindó una entrevista y habló sobre un mito que gira alrededor de los restaurantes: qué sucede cuando un comensal devuelve un plato. En una entrevista, el prestigioso chef fue consultado sobre los comensales que los gastronómicos esperan no volver a recibir en su vida, aquellos […]

Damián Betular respondió el mito más grande de los restaurantes: “¿Qué pasa si te devuelven el plato a la cocina?”

Mientras disfruta de un nuevo éxito de Masterchef, Damián Betular brindó una entrevista y habló sobre un mito que gira alrededor de los restaurantes: qué sucede cuando un comensal devuelve un plato.

En una entrevista, el prestigioso chef fue consultado sobre los comensales que los gastronómicos esperan no volver a recibir en su vida, aquellos que protagonizaron alguna mala situación.

No nos sale todo bien todos los días y por ahí uno comete un error porque en el equipo hay humanos trabajando, hay personas. Y a veces la crítica es un poco injusta en un día que justo pasó eso. Y uno trata de resolver”, respondió Betular.

No es que le haga caso tampoco. Nunca tuve comensales malos. No te lo dicen en el momento”, agregó el jurado de Masterchef, que actualmente tiene como conductora a Wanda Nara.

Sobre el mismo eje, y ante la pregunta sobre las presuntas maldades de las que se habla que realizan o pueden llegar a realizar desde la cocina de los restaurantes, Damián Betular fue categórico en su respuesta.

No hay tiempo para hacer esas maldades. Y devolver el plato, más cocido o algo de eso. No dejan de ser mitos. Capaz que existieron en algún momento. Yo no creo que ningún profesional haga esas cosas”, aseguró.

En ese sentido, Damián Betular sostuvo que los cocineros tienen que adaptarse a los pedidos, gustos y requerimientos de los clientes, a pesar de que tal vez no coincidan para nada con los de los propios gastronómicos.

Uno se tiene que adaptar. Por ahí uno está acostumbrado a comer la carne de una manera. Tengo una amiga que cada vez que vamos a comer pide el lomo bien cocido. Para mí es como un puñal, pero si te gusta el lomo bien cocido y sos feliz, comé el lomo bien cocido”, comentó.