Milei negó la cifra de 30 mil desaparecidos y dijo que en los ‘70 “hubo un guerra”

Durante el bloque del tema elegido por la ciudadanía para el primer debate presidencial, sobre derechos humanos y convivencia democrática, el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, reivindicó el discurso de su compañera de fórmula, Victoria Villarruel, y negó la cifra de los 30 mil desaparecidos, además de sostener que en los años ‘70 en Argentina “hubo una guerra”. 

“Los liberales en Argentina hemos sido acusados de cosas realmente aberrantes como fachos, fascistas, nazis, cosas que no tienen nada que ver con nosotros”, arrancó el liberal en su exposición, para luego expresar: “Nosotros valoramos la visión de memoria, verdad y justicia. Empecemos por la verdad: no fueron 30 mil los desaparecidos, son 8.753”. 

“Estamos absolutamente en contra de una visión tuerta de la historia. Para nosotros en los ‘70 hubo una guerra. Y en esa guerra las fuerzas del Estado cometieron excesos y por tener el monopolio de la violencia les vale todo el peso de la ley. Pero también los terroristas de Montoneros y el ERP mataron gente, torturaron gente, pusieron bombas, hicieron un desastre y también cometieron delitos de lesa humanidad”, lanzó. 

Y apuntó contra las organizaciones de derechos humanos: “Tampoco estamos de acuerdo con los curros de los derechos humanos, aquellos que usaron la ideología para ganar plata, para hacer negocios turbios, ¿o no recuerdan algo así como Sueños Compartidos? O lo que es la propia Universidad de Madres de Plaza de Mayo”, sobre la universidad recientemente creada por ley. 

“Necesitaría cuatro o cinco horas para responder las barbaridades que he escuchado”, manifestó Myriam Bregman en su derecho a réplica, que utilizó para apuntar contra Milei al cuestionar que “cuando él habla de libertad, habla de la libertad para poder despedirte sin indemnización” o “que tengas que vender un bracito para llegar a fin de mes”. “Si queres salud, pagatela. Hasta defiende la libertad para contaminar los ríos. La libertad para Milei es ‘sálvese quién pueda’. Milei ensucia la palabra libertad”, agregó la candidata del Frente de Izquierda. 

Cruces Bregman-Bullrich por los piquetes

En su exposición, la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, consideró que “los argentinos ya aprendimos que cuando no impera la ley llegan las tragedias” y “la única manera de hacer política en serio es en paz y en convivencia”. “Todo el día están diciéndome que yo usé la violencia, yo no la usé, yo fui parte de una organización juvenil, y siempre lo dije”, respondió a las acusaciones en su contra, tildada por Milei como “montonera”. 

Yendo al eje de convivencia democrática, la dirigente del Pro aseveró: “Basta de piquetes, basta de hacer de la vida de la gente una convivencia imposible. Vamos a terminar con los piquetes, con la toma de tierras, vamos a representar a todos los argentinos que quieren vivir en paz”. 

“Todos los sindicatos y piqueteros que responden a este Gobierno están todos callados, pero cuando viene otro gobierno, viene la lucha”, advirtió. 

Bregman le recordó los casos de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, cuando ella fue ministra de Seguridad durante el gobierno de Cambiemos, al tiempo que pronosticó que “todas sus políticas implican represión”. “Lo que le voy a aclarar desde ahora es que a nosotros nos va a encontrar acompañando cada uno de esos reclamos en las calles”, le dijo.

“Quiero mandarles un abrazo grande a los gendarmes que fueron absueltos”, respondió desafiante Bullrich, que defendió a las fuerzas de seguridad “por cumplir con la ley y con el deber”. 

En otro tramo, Bregman cuestionó “la represión al pueblo jujeño” en junio pasado, algo que “Bullrich lo avaló, Milei dijo que (Gerardo) Morales había actuado con tibieza, y Sergio Massa dijo que si llega a ser gobierno va a invitar al represor Morales a conformarlo con él”. 

Qué dijeron Schiaretti y Massa

En este bloque, el candidato de Hacemos por Nuestro País, Juan Schiaretti, resaltó que “los derechos humanos son patrimonio de todos los argentinos y no pueden ser utilizados por un partido político o un gobierno intentando apropiarse de eso”. Destacó que en su provincia se “respetan las instituciones” y “jamás se nos ocurriría hacerle un juicio político” al tribunal de Justicia como lo hace el Gobierno nacional con la Corte Suprema, además de “no respetar un fallo de la justicia”. 

Tras afirmar que en su provincia se respeta también la libertad de prensa, se diferenció: “No le echamos la culpa (a los medios), como hace el gobierno de Massa. Ni espiamos a nadie como hizo el gobierno de (Mauricio) Macri”. 

Por su parte, Massa le agradeció a la gente por incluir este tema que “algunas fuerzas políticas no lo querían incluir a pesar de que debe ser una política de Estado”. “Quiero en primer lugar contarles cuál es el desafío que tenemos a 40 años de democracia: primero cuidar el legado memoria, verdad y justicia, camino que iniciamos con el Juicio a las Juntas y terminamos con la condena de los represores. Camino que a la Argentina le valió un enorme reconocimiento internacional que permite que los argentinos seamos palabra mayor a nivel internacional en los organismos de derechos humanos”, expresó. 

Y continuó diciendo que “tenemos una responsabilidad de agregar la agenda de los nuevos derechos humanos” como “el derecho a un ambiente sano, el derecho a la salud, el derecho a la educación, el derecho a la tierra y el derecho de las víctimas de delito y de violencia a ser asistidos por el Estado”.

“Tenemos que construir sobre esos nuevos derechos una agenda de políticas de Estado y para eso necesitamos apelar a la convivencia democrática y a los grandes acuerdos. Muchas veces fui muy criticado por mi capacidad de diálogo, muchas veces fui vapuleado por dialogar con todos los sectores, hoy quiero aprovechar el capítulo de convivencia democrática para insistir en que el 10 de diciembre voy a convocar a un gobierno de unidad nacional”, reiteró.

En ese sentido, el candidato de Unión por la Patria afirmó que “nadie puede sorprenderse porque vean en mi gobierno a sindicalistas o empresarios, a trabajadores o comerciantes, porque vean a sectores liberales radicales o del Pro, porque en definitiva el desafío que tenemos es construir políticas de Estado y la convivencia democrática y el desarrollo de una nueva agenda deben ser un compromiso de toda la dirigencia de la Argentina”.