Traspaso de mando: Milei asumió entre gritos de "libertad" y silencio ante la Asamblea Legislativa

La ceremonia de traspaso de mando y asunción como presidente de Javier Milei empezó con una sonora ovación de senadores y diputados para el nuevo mandatario, en momentos en que todavía estaba en el Hotel Libertador.

La ceremonia comenzó pasada las 11 horas con Cristina Kirchner y Martín Menem al frente, y con gobernadores, jueces, designados ministros y mandatarios extranjeros entre los espectadores. El ucraniano Volodímir Zelenski es el invitado estrella.

"Libertad, libertad", cantaron diputados, senadores e invitados de La Libertad Avanza cuando se leyó el acta de apertura de la ceremonia de traspaso de mando. Tras eso, una Cristina bastante incómoda llamó a un cuarto intermedio. 

Un rato antes, la vicepresidenta saliente le había hecho "fuck you" a unas personas que la insultaron cuando ingresaba junto a su hijo Máximo.

Alberto Fernández llegó al Congreso a las 11.30 y fue recibido por un grupo de legisladores. Unos minutos después llegó Mauricio Macri, que se dio un abrazo efusivo con Jair Bolsonaro.

Milei salió del Hotel Libertador a las 11.35  junto a su hermana Karina, que hizo las veces de primera dama. La novia del presidente, Fatima Florez, había estado en el Libertador pero se fue sola y en el Congreso estuvo junto a los padres de Milei.

El presidente electo saludó a sus seguidores desde su auto a lo largo del trayecto al Congreso, adonde llegó pasadas las 11.45.

Milei saludó a Cristina primero con frialdad y después mantuvieron una breve charla, en la que se vio al presidente soltar alguna sonrisa. Milei estampó su firma en los libros de honor con un clásico: "Viva la libertad, carajo".

Además de Zelenski, entre los invitados internacionales destacó Jair Bolsonaro, que llegó como un rockstar al Congreso. También participan el rey de España Felipe VI; los presidentes de Chile, Gabriel Boric; de Uruguay, Luis Lacalle Pou; de Paraguay, Santiago Peña; de Ecuador, Daniel Noboa, y el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán.

"Motosierra, motosierra", fue otro de los gritos de los simpatizantes de LLA desde las gradas. También hubo algunos que gritaron "vagos", "vayan a laburar" a los legisladores peronistas y de izquierda.

Un dato que llamó la atención entre algunos diputados y senadores fue que hubo bancas vacías, algo poco habitual en los actos de asunción de presidentes. "Sobran bancas, algo que no ha pasado en otros asambleas legislativas. Te diría que sobran 30 bancas", dijo a LPO un diputado de Juntos por el Cambio.

El acto de asunción tuvo múltiples incomodidades. Alberto y Cristina sólo se saludaron fríamente después de un rato de empezado el acto, mientras que Villarruel y Milei se mostraron sonrientes pero la vice no lo acompañó en su discurso posterior. El líder libertario estuvo bastante nervioso y le tuvieron que marcar varias veces qué hacer.

Cristina pareció más cómoda con Milei que con Alberto y hasta se rió a carcajadas cuando el nuevo presidente le mostró un detalle del diseño del bastón: lleva grabados a sus cinco perros. 

Por pedido de Milei, la jura fue distinta a las conocidas y tanto el presidente como la vice se leyeron sus juramentos. Luego se retiraron Cristina y Alberto, y cuando todos esperaban que el presidente diera algunas palabras, sólo Villarruel tomó el micrófono para avisar que no sólo hablaría en las escalinatas. 

Los jueces de la Corte y algunos legisladores se quedaron esperando, con obvia molestia. La mayoría de los invitados se retiró porque no tenía dónde escuchar el discurso.