El polémico voto libertario contra el duelo por la AMIA

Las explicaciones brindadas por el bloque de Milei y lo que sucedió a medianoche en la sesión de Diputados.

El polémico voto libertario contra el duelo por la AMIA

Ya es una marca registrada que el diputado Javier Milei y su compañera de bancada, Victoria Villarruel, votan todo en contra. Se les suele sumar Carolina Piparo, precandidata a gobernadora bonaerense de La Libertad Avanza, pero con bloque propio en la Cámara. Y esos votos en contra no pueden ser cuestionados, por cuanto no son más que una muestra de lo consecuentes que son de sus ideas. Por ejemplo, en no votar nada que imponga gasto del Estado, así sean proyectos de salud apoyados por todos.

Pero esa postura férrea puede volvérseles en contra, como sucedió en la sesión de esta última semana, cuando Milei y Villarruel aparecieron votando contra un proyecto para declarar como Día de Duelo Nacional al 18 de julio de cada año, en homenaje a las víctimas del atentado terrorista perpetrado contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina en el año 1994. Fueron los únicos dos votos en contra que tuvo un paquete de nueve temas sumados promediando la sesión. Fueron votados a favor por 171 diputados y 6 se abstuvieron. Hubo inicialmente un tercer voto en contra, el de Sergio Palazzo, que inmediatamente después consignó que había votado así por error.

Ante las críticas de por ejemplo la AMIA, los diputados libertarios justificaron su postura. Primero lo hizo la precandidata a vicepresidenta, que a través de un tuit publicó la convocatoria a sesionar y el acta elaborada en Labor Parlamentaria, donde esos proyectos no figuraban, y argumentó que “a la medianoche votaron un paquete de ocho proyectos que no estaban en la orden del día, por lo que no habiendo sido analizados decidimos con Javier Milei no votarlos a favor”.

Diría después la diputada que “no se dijeron ni los títulos de los proyectos que se votaron”. El propio Milei, el sábado en diálogo con el periodista Francisco Olivera, por CNN Radio, insistió con esa argumentación: “Cerca de medianoche y en un acuerdo entre el kirchnerismo y Juntos por el Cambio mandan un paquete de ocho leyes todas juntas y se votaban todas juntas. O votabas a favor, en contra o te abstenías”. Y agregó que “nos mandaron los números y no estaban los nombres de los proyectos, además no podés estar analizando un proyecto en cinco minutos. Discúlpenme, pero al kirchnerismo no le voto nada a libro cerrado. No voy a hacer esa irresponsabilidad”.

Es cierto que ese paquete de proyectos -nueve, no ocho- se pusieron a consideración al filo de la medianoche, pero la verdad es que sí figuraban los títulos de cada iniciativa y el link que llevaba a los expedientes, que en general no eran extensos pues se trataba de temas menores: cuatro “días de”; una declaración de interés (el único proyecto de declaración y se votó aparte, a mano alzada); la creación de la Red Federal de Bibliotecas Parlamentarias; un acuerdo para eliminar el cobro de roaming internacional en el Mercosur; modificaciones a la Ley de Tránsito y la eliminación del trámite de fe de vida para jubilados. Entre los “días de” figuraba el homenaje a víctimas del atentado a la AMIA. No había que leer demasiado para entender de qué se trataban.

Pero además, a la hora de anunciarlos, la secretaria parlamentaria del oficialismo, Paula Penacca, recordó que la sumatoria de esos proyectos había sido conversada en Labor Parlamentaria para reunir algunos pedidos de apartamiento de reglamento de los distintos bloque y votarlos de esa manera. A continuación, se leyeron los títulos y números de expedientes, tal cual consta en la versión taquigráfica, y en el caso puntual del atentado contra la AMIA se anunció que habían acordado modificaciones que se leyeron antes de la modificación.

“En el artículo 2° eliminamos la parte que dice ‘en los que se promoverá la realización de actividades alusivas’. Por lo tanto, queda redactado de la siguiente manera: ‘Dispóngase que el día 18 de julio de todos los años la bandera nacional permanecerá izada a media asta en los edificios y lugares públicos’”, leyó Penacca, para agregar luego que “el artículo 3° lo volvimos a redactar y queda de la siguiente manera: ‘El Ministerio de Educación, mediante el Consejo Federal de Educación, en coordinación con las autoridades educativas de las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dispondrán los medios necesarios a fin de que los establecimientos de educación pública primarios y secundarios de gestión estatal y privada organicen y desarrollen actividades conmemorativas para dicha fecha’”.

De manera tal que ese proyecto en particular fue el único que se leyó casi en su totalidad antes de la votación. También intervino la diputada Graciela Ocaña, para celebrar la inclusión en ese temario de la eliminación del trámite de fe de vida. Antes de votar, la izquierda explicó cuáles votarían a favor, cuáles en contra y en cuáles se abstendrían.

En síntesis, lo que sucedió pareció ser más una muestra de impericia parlamentaria que la reacción ante un acuerdo entre gallos y medianoche.