Alberto no firmará el acuerdo y los funcionarios de la UE se bajaron de la cumbre del Mercosur
"No estamos de acuerdo con el contenido", explicaron desde la Cancillería. Macron también lo rechaza.
El acuerdo del Mercosur con la Unión Europea está a un paso de volver a fracasar. Tras 20 años de idas y vueltas, los esfuerzos de Lula, Pedro Sánchez y Úrsula Von der Leyen para que esta vez prospere caminan al naufragio. Alberto no firmará y el pacto se caerá hasta nuevo aviso.
"No vamos a firmar porque no estamos de acuerdo con el contenido y estamos a días de irnos", explicaron a LPO desde la cancillería. "La Argentina trabajó muchas medidas para mejorarlo y cuidar la industria y las exportaciones. Que ya se presentaron", agregaron.
Como reveló en exclusivo LPO, el presidente de Brasil viene trabajando desde julio para que los europeos cedan antes las condiciones ambientales y de esa manera anotarse otro logro en materia de política internacional. Una misión compartida con Pedro Sánchez en su intención de posicionarse como uno de los referentes europeos y de la propia Von der Leyen que posó sus ojos en América Latina para ensayar algo para parecido a la autonomía estratégica. Los tres, de confirmarse que el acuerdo no se cerrará, son los grandes derrotados.
Brasil no ocultó su enojo con Alberto que, luego de poner como excusa un posible veto de Javier Milei en medio de la transición, terminó dando marcha atrás luego de desempolvar viejas críticas que apuntan a las supuestas consecuencias negativas para la industria y las pymes argentinas.
"No quiso pagar ningún costo", cuenta un diplomático que empujó hasta último momento para que el acuerdo no se caiga y se aferra a "un milagro de último momento".
Pero al margen de los habituales vaivenes del presidente argentino, quien terminó de enterrar toda posibilidad de triunfo de Río de Janeiro es Emmanuel Macron, el presidente de Francia que dejó en claro su rechazo por no contemplar cuestiones ambientales y, detrás de eso, la Política Agricola Común (PAC) con la que protege a sus agricultores.
Lula salió rápidamente al cruce y aclaró que "no hay novedad con la posición de Macron, esa no es la posición de la Unión Europea". "Ahora no pueden decir que la responsabilidad de que el acuerdo no salga es de Brasil", se defendió.
Ursula Von der Leyen, presidenta de la comisión europea.
Con este cuadro de complejidad, Von der Leyen no iría a Río y Valdis Dombrovskis, el encargado de la Comisión Europea para la negociación, canceló su presencia en la cumbre.
Una fuente en Bruselas que forma parta de las negociaciones dijo a LPO que "en la comisión salió a aclarar que no está muerto sino que hay un impasse".
"Políticamente para Von Der Leyen es un fracaso fuerte, ya fracasó con Australia que la dejaron colgada y ahora con el Mercosur, son dos promesas de ella en distintos foros incluyendo el discurso de Estado de la Unión", agregó.
La presidencia pro-témpore de la Unión Europea la presidirá Bélgica durante el primer semestre del 2024 y habría que si el debate seguirá en la lista de espera. A su vez, el presidente de Paraguay, Santiago Peña que asumirá la conducción semestral del bloque reconoció que se enfocará en "otros mercados".
En paralelo, la asunción de Javier Milei, con quien Lula dijo que está dispuesto a negociar el acuerdo, es otro de los interrogantes sobre el futuro del bloque que formarán parte de la agenda prioritaria de la cumbre del miércoles y jueves en Río de Janeiro.
