Valdés se mete en la interna de la UCR cordobesa y apunta a Lousteau

Impulsa la candidatura de Bee Sellares, exfuncionario del mestrismo y actualmente al frente de la Lotería de Corrientes. La buena sintonía con De Loredo y la preocupación para que la tensión nacional no se traslade a la disputa del radicalismo cordobés.

Valdés se mete en la interna de la UCR cordobesa y apunta a Lousteau

Por debajo de la superficie del escenario nacional por la gestión de Javier Milei y la fricción con el gobernador Martín Llaryora, el radicalismo de Córdoba agita su clima de interna. Contienda que, hasta ahora, se llevará adelante el 5 de mayo y despierta particular interés entre los popes del partido a nivel nacional.

Como se contó en LPO, desde el presidente de la UCR, Martín Lousteau, hasta el gobernador mendocino Alfredo Cornejo, pasando por el jujeño Gerardo Morales, todos aguardan expectantes a cómo se desarrollará la pulseada cordobesa que tiene un nuevo actor: el gobernador correntino, Gustavo Valdés. Previo a los gestos del radical con el presidente Milei, la semana pasada se conoció el impulso para que un dirigente muy cercano a su entorno se convierta en otro de los candidatos a comandar las riendas de la UCR cordobesa.

Se trata de Javier Bee Sellares, exlegislador provincial, con un pasado en la gestión municipal del exintendente Ramón Mestre y actualmente interventor de la Lotería en Corrientes. Además de haber sido, junto a Valdés, parte de la cúpula de la Juventud Radical en los '90.

Valdés pone así un pie en la tensión cordobesa mientras observa los pasos que da Lousteau, de relación cortada con el jefe del bloque en Diputados, Rodrigo de Loredo. Vínculo que pone en jaque la continuidad del cordobés al frente de la bancada y para el cual, debería De Loredo volver a contar, como ocurrió en diciembre pasado, con el respaldo clave de los gobernadores.

"Cuando había que elegir autoridades en Diputados a Rodrigo lo bancaron los del interior con una reunión en Buenos Aires en la que también Valdés lo respaldó", dijo un radical que conoce el clima en los pasillos del Congreso. Y que también reconoce, no sólo el enojo de Lousteau con De Loredo, sino también el de Emiliano Yacobitti con el cordobés.

"Para 'Yaco', la prioridad por encima de cualquier otro dirigente es Lousteau. Y así se lo dijo a los gobernadores en diciembre cuando se discutía la jefatura de bloque", repasan. Encuentro en el que, además de Lousteau, estuvo el santafesino Maximiliano Pullaro y el correntino Valdés.

Hasta ahora, la incidencia nacional está reflejada en Cornejo con la diputada Soledad Carrizo, Valdés con Bee Sellares y en Córdoba tratan de acercar posiciones entre Lousteau y De Loredo. Por ahora, al margen de las referencias nacionales, los cordobeses que tienen las mencionadas terminales fuera de la provincia, ensayan una buena sintonía entre ellos.

De Loredo, Carrizo, Bee Sellares y el riotercerense Marcos Ferrer, el más puro de Evolución en Córdoba, tienen diálogo. Aunque dentro del grupo, y debajo de cada espada provincial, están los que repiten que "los límites son (Ramón) Mestre y (Mario) Negri". Ambos con mucho peso dentro de la estructura de la UCR cordobesa.

"Puede haber consenso, incluso de aquellos cuyos referentes nacionales están peleados entre sí. Por ejemplo, De Loredo, Ferrer y Bee Sellares tienen buen diálogo y esta semana, Lousteau y Valdés se dijeron de todo. Por eso, mientras podamos ‘alambrar' al radicalismo cordobés de esas fricciones se puede llegar a un consenso interesante", dicen.

Este lote puede terminar convergiendo en un mismo espacio de cara a la interna, aunque todo es materia de discusión constante. Se va a acordar, siempre y cuando no haya disconformidad y todas las piezas del rompecabezas encajen.

Mestre, como así también Negri, son una incógnita. El exintendente se mostró cerca del jujeño Morales en el último tiempo y eso también pesa, según lo que creen aquellos que frenan algún arribo del dos veces intendente a este heterogéneo espacio.

Como se sabe, Morales y Lousteau no piensan lo mismo de Milei que Valdés y Cornejo. Los que representan a ambos en Córdoba, con bemoles, tampoco piensan lo mismo. Los alfiles de Valdés reconocen que, fuera de su provincia, el correntino quiere activar la territorialidad por Misiones y Córdoba. "Quiere apostar todo donde la UCR no gobierna", dicen y defienden el vínculo con Milei.

"Hay que entender que, si el PRO se junta con los libertarios, nosotros quedamos terceros y muy atrás", confiesan.