En el bloque radical molesta la cercanía de De Loredo con Macri y ya hablan de correrlo

Puertas adentro en el radicalismo le facturan la relación que mantiene con Macri. Los rumores dentro de la bancada, el fantasma de Negri y la tensión con Evolución.

En el bloque radical molesta la cercanía de De Loredo con Macri y ya hablan de correrlo

 Con el final del primer día del debate en comisión por la ley ómnibus que envió el presidente Javier Milei, uno de los hombres puesto en el foco dentro del Congreso fue el jefe del bloque UCR en Diputados, el cordobés Rodrigo de Loredo. Ambiguo en momentos de su exposición, la postura del radical confundió a los propios y también a los socios dentro de Juntos por el Cambio, cuando habló de dar gobernabilidad a Milei.

Sin embargo, según reconocieron fuentes del Parlamento a LPO, el juego del radical entre el respaldo y las advertencias, evidenció la incómoda posición de De Loredo. Incluso, algunos creen que se arriesga la jefatura del bloque en plena discusión del paquete de leyes en enero y hay facturas que pueden asomar con el período de sesiones ordinarias en marzo.

De hecho, antes de fin de año, el rumor dentro del propio bloque sobre una posible salida de De Loredo como jefe de bloque motivó varias conversaciones acaloradas en la bancada. Con aquellos que sostienen al excandidato a intendente en Córdoba y los que se hicieron eco del desplazamiento.

Mismas charlas que se reactivaron ayer después de la exposición de De Loredo y los cruces que, entre otros, encaró el alfonsinista que integra el bloque Unión por la Patria, Leandro Santoro.

En las últimas horas, cordobeses de Juntos en Diputados reconocieron las presiones al cordobés para mostrar un guiño a los libertarios. Y ven detrás de esa movida la mano del expresidente Mauricio Macri, relación de la cual De Loredo no puede escapar desde el año pasado.

"Los radicales lo chicanean con que lo manda Macri y Mauricio manda a presionar como para refrescarle a Rodrigo cómo viene la mano", dijo un diputado que reconoció las órdenes de boca de un exministro macrista en tiempos de Cambiemos.

Por fuera, los que observan cómo se mueve el radical cordobés está el presidente de la UCR Nacional, Martín Lousteau. Con quien la relación de De Loredo atravesó varios vaivenes en los últimos meses. Por un lado, el cordobés le garantizó los votos en el acuerdo interno del radicalismo con sus delegados; y el senador le aseguró a De Loredo la conducción de un bloque unificado en la Cámara baja. Sin embargo, los ruidos se sostuvieron.

En tanto, el temor a la fractura o al corrimiento de la presidencia se repite y con un mismo fantasma: el exdiputado Mario Negri. El caudillo radical y De Loredo tuvieron una conversación antes de fin de año en el Congreso y, entre otras cuestiones como la posibilidad de que el PRO rompa la alianza de Juntos en Córdoba, hubo incomodidad porque el actual parlamentario desconfía de alguna maniobra del exdiputado. Concretamente, fricciones cordobesas podrían replicarse en el Congreso.

A esto se suman, a raíz del paquete de leyes que envió Milei, el pedido de los cordobeses de Evolución de no acompañar o en su defecto despegar del proyecto de privatización de empresas del Estado, la Fábrica Militar de Río Tercero. Empresa emblema antes y después de la voladura en tiempos del menemismo; y una de las preocupaciones por el riesgo de la pérdida de fuentes laborales del intendente riotercerense Marcos Ferrer. Hombre de Evolución de línea directa con Lousteau y Emiliano Yacobitti.

No obstante, aquellos que hablan a diario con De Loredo y Ferrer sostienen que la alianza entre ambos es lo suficientemente sólida como para que la ley ómnibus la esmerile.

Por último, el factor que incrementa las chances de un respaldo más concreto de De Loredo a Milei pasan por la relación del radical cordobés con su electorado. "Rodrigo no va a chocar con Milei porque es ponerse en contra de sus propios votantes y los va a necesitar el año que viene cuando quiera renovar la banca", cerró una fuente cercana al radical.